NUEVO Villa Termal de O Incio

Es un destacado monumento románico del siglo XII, único en Galicia por estar construido en mármol, un material poco común en la arquitectura eclesiástica de la región. Vinculada a un antiguo hospital de peregrinos, su fachada es sencilla, con una portada románica de arcos y capiteles decorados, encuadrada por dos anchos contrafuertes, mientras que en su interior se aprecian detalles escultóricos tallados en mármol. Declarada Bien de Interés Cultural (BIC), la iglesia refleja la importancia histórica y artística del patrimonio medieval de Galicia. 

El conjunto se completa con la Torre de Hospital, de origen gótico, construida también en mármol por la orden de San Juan de Jerusalén. Esta torre defensiva, situada entre la iglesia y la carretera, conserva una puerta y ventanas con arcos apuntados, así como un escudo de armas. Rodeada por un hermoso bosque autóctono, la iglesia y la torre son paradas obligadas para los visitantes y un punto de conexión con el pasado religioso y defensivo de la comarca. 

La Iglesia de Santalla de Trascastro, ubicada en el municipio de O Incio, es una iglesia rural con origen medieval, probablemente del siglo XII, aunque ha sido transformada a lo largo de los siglos. Construida en mampostería de piedra, su diseño combina elementos románicos con aportaciones posteriores de estilo barroco, reflejo de las intervenciones que ha experimentado.

El templo presenta una planta de nave única, con una fachada sencilla que destaca por su espadaña, elemento típico de las iglesias rurales gallegas, integrada en el cuerpo principal de la iglesia. En su interior conserva detalles arquitectónicos y artísticos de valor histórico, como frescos y tallas, aunque muchos han sufrido el desgaste del tiempo.

Rodeada de un entorno natural idílico, la iglesia es un lugar emblemático para la comunidad local y los visitantes que buscan conocer el rico patrimonio cultural de la comarca. A pesar de su estado actual, sigue siendo un testimonio de la espiritualidad y la historia de la región.

En el término de O Incio se encuentra el antiguo balneario de Ferreira, una joya histórica en estado de abandono que data del siglo XIX. Construido en 1884 por la Casa de Campomanes, el balneario se destacó por su arquitectura clásica y su función como centro de salud, atrayendo a visitantes en busca de las propiedades terapéuticas de sus aguas ferruginosas. La fuente se encuentra en una sencilla construcción cercana al balneario, sin mayor interés arquitectónico, y sus aguas, que fueron declaradas de utilidad pública en 1894, se embotellaban para su comercialización en farmacias y fueron premiadas en diversos certámenes. 

El edificio principal, de mampostería de piedra y bloques de granito, presenta una estructura de dos cuerpos laterales de tres alturas unidos por un cuerpo central de dos plantas y un desván. Aunque actualmente está en ruinas, aún conserva el encanto de su época dorada. El establecimiento contaba con piscina, un jardín junto al río Antigua y una capilla. Hoy en día, es un lugar de interés para curiosos, senderistas y fotógrafos, ofreciendo una conexión nostálgica con el pasado de O Incio y reflejando la interacción entre historia y naturaleza del municipio.