NUEVO Villa Termal de Mantiel

A pesar de su pequeño tamaño y la escasa población del municipio, que cuenta con menos de 50 habitantes, el Ayuntamiento de Mantiel tiene un valor notable. Desde el punto de vista patrimonial y cultural, Mantiel es uno de los pueblos históricos de la comarca de La Alcarria, y su ayuntamiento es una institución clave para la preservación de su patrimonio y tradiciones locales. Aunque la creación del embalse de Entrepeñas sumergió parte de su término municipal y afectó a su economía, Mantiel ha logrado mantener su identidad como un auténtico pueblo rural de Castilla. A nivel administrativo, el ayuntamiento sigue siendo el núcleo de la vida local, gestionando los servicios esenciales y atendiendo las necesidades de los vecinos. Además se encarga de organizar eventos y fiestas que refuerzan el sentido de comunidad y preservan las costumbres que han definido la localidad a lo largo del tiempo. La proximidad del embalse de Entrepeñas y el atractivo natural que lo rodea, también otorgan un valor turístico a Mantiel, donde el consistorio juega un papel clave en la promoción del turismo rural, facilitando actividades como el senderismo, la pesca y otras experiencias recreativas ligadas al entorno del embalse, que atraen a visitantes interesados en disfrutar de la tranquilidad y la naturaleza de la zona. 

La Iglesia Parroquial de Mantiel se erige en la parte más alta del pueblo, ofreciendo una vista privilegiada de la localidad y sus alrededores. Su existencia está documentada desde mediados del siglo XVII, con un registro de 1661 conservado en el Archivo Histórico Nacional de Madrid que menciona las cuentas de la iglesia. 

De estilo neoclásico, la iglesia presenta una planta de cruz latina. Su portada, situada bajo un tejadillo sostenido por columnas, se distingue por un amplio vano adintelado rodeado de molduras elegantes. La espadaña consta de dos cuerpos: el inferior, que alberga la portada y un pequeño vano cuadrangular, y el superior, con dos arcos de medio punto que sostienen las campanas, rematados por un tímpano triangular. 

Construida en sillar, la iglesia cuenta con una nave sencilla de cinco tramos, cubierta por una bóveda de medio cañón sostenida por arcos de medio punto. Esta estructura se repite en el coro, la capilla mayor y los brazos laterales, unificando el espacio interior con armonía y solidez arquitectónica. 

Desde una perspectiva aérea, Mantiel se presenta como un pequeño enclave en el corazón de la Alcarria, que ofrece una imagen bucólica con su pequeño y compacto caserío de casas blancas y tejados rojos, rodeado de suaves colinas cubiertas de matorrales aromáticos y campos de cultivo dispersos, salpicadas aquí y allá por olivares, almendros y pastos. El relieve, ondulado y amable, refleja la esencia de esta comarca, donde la tierra caliza y las hierbas aromáticas, como el tomillo y el romero, conforman un escenario de gran riqueza natural en el que se sustenta su economía, principalmente agrícola y ganadera, destacando la producción de miel y aceite de oliva como sus recursos más importantes.

A vista de pájaro, se percibe la íntima armonía entre la actividad humana y el entorno, sin grandes alteraciones que rompan el equilibrio. Esta visión panorámica de Mantiel transmite una imagen de identidad, sosiego y una estrecha sintonía con la tierra.